Por Reynaldo Tovar Carrasquilla *
Cartagena necesita al frente de la Alcaldía a un líder capaz de abordar con éxito los cada vez más crecientes problemas de la ciudad, entre ellos la inseguridad, la pobreza y la desigualdad.
Por ello, el nuevo mandatario debe ser diligente, transparente y comprometido con el bienestar de los cartageneros. De todos sus hombres y mujeres, sin distingos de ninguna naturaleza.
En concreto, el alcalde que necesita Cartagena debe:
- Combatir la inseguridad: Cartagena es una ciudad con altos índices de violencia y criminalidad, por ello su máxima autoridad civil debe implementar un plan integral para combatir este flagelo, que incluya estrategias de prevención, disuasión y represión.
- Fomentar el desarrollo económico: Cartagena tiene un gran potencial económico, pero este no se ha aprovechado plenamente. Por tal razón, la capital de Bolívar debe implementar políticas que promuevan la inversión y la creación de empleo, entre otros con el activo más importante que tenemos, que son nuestros cuerpos de agua internos y externos.
- Mejorar la calidad de vida: Cartagena es una ciudad con grandes desigualdades sociales. El alcalde -en consecuancia – debe implementar políticas que mejoren la calidad de vida de todos los cartageneros, especialmente de los más vulnerables.
Y no hay dudas de que el candidato que reúne estas características es Dumek Turbay Paz, quien tiene una amplia experiencia en el sector público y ha presentado un programa de gobierno con propuestas concretas para abordar los problemas de Cartagena, centrado en el desarrollo sostenible, la creación de empleo y la mejora de la calidad de vida.
Adicionalmente, su visión de ciudad es positiva y esperanzadora, en medio del escenario negativo y desperanzador que nos deja como herencia el nefasto gobierno que afortunadamente termina; y ofrece a los cartageneros la oportunidad de construir una ciudad segura, educada, prospera, sostenible, participativa y, lo más importante, con oportunidades para todos.
Pero Cartagena necesita también un gobernador que, como el actual, siga invirtiendo en nuestra ciudad, y ese indiscutiblemente es Yamil Arana Padauí, para quien -por lo que se ha podido conocer – lo más importante es poder satisfacer las necesidades de la gente, impulsado políticas sociales que ofrezcan mejorar la seguridad, la educación y salud de los cartageneros.
Estoy convencido, como por lo visto están convencidos también millares cartageneros, que de la mano de Dumek y Yamil tendremos el modelo de ciudad que tanto necesitamos y hemos anhelado.
Y, claro que sí, la decisión de quiénes serán los nuevos mandatarios locales alcalde y gobernador es personal; cada cartagenero debe evaluar las propuestas de los candidatos y decidir cuál es -en su criterio – la mejor opción para la ciudad, pero estoy convencido que la inmensa mayoría de los ciudadanos comprendió que el craso error que se cometió en la elección de hace cuatro años se vuelva a repetir.
* Abogado y Director Ejecutivo de Transparencia Caribe
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