
Por Carlos Féliz Monsalve *
Es un modelo que la actual administración distrital ha querido establecer de manera clara y decidida. Es un camino para avanzar en la cohesión social, donde cada uno de los ciudadanos sienta propio ese acercamiento entre Distrito y comunidad.

Es un tema de corresponsabilidad comunitaria para la toma de decisiones bajo políticas públicas concretas y poder apuntar a una gestión pública de excelencia, pero, sobre todo, concentrada y escuchando a la gente.
Desde el Consejo de Gobierno Distrital y con orientaciones de abordamiento a la comunidad, liderado por el naciente Instituto Comunal de Cartagena, bajo competencias regladas en materia de salud, educación, infraestructura urbana, vivienda y gestión social, se generan resultados para alcanzar oportunidades con principios de inclusión, participación e igualdad, para propiciar progreso colectivo e individual en un conglomerado social golpeado en los últimos años por malas administraciones y por la falta de planeación para el desarrollo.
Cada gobierno, en sus particularidades, con su órgano corporado y con las instancias de planeación y validación comunitaria, elabora su plan de desarrollo.
A esos compromisos electorales se suman las propuestas de los ciudadanos, con su visión de ciudad expresada en procesos de participación que pretenden lograr el máximo consenso social en las acciones que día a día despliega el gobierno local.
El éxito en esta gestión de gobernanza se reconoce cuando la voluntad política, la oferta de servicios distritales y las organizaciones comunales de cada uno de nuestros barrios se encuentran permanentemente para resolver conflictos de convivencia y trabajan por transformar un territorio puntual en un lugar ideal para vivir y encontrar bienestar.
Con instituciones educativas, canchas deportivas, parques, hospitales, programas de formación para jóvenes, actividades socioculturales y una gran transformación de la infraestructura, se busca un mobiliario urbano para el goce efectivo del espacio público.
La política del Gobierno Distrital, la gestión y la comunidad avanzan juntos para renovar, reformar y recuperar, urbanística y socialmente, un barrio, un corregimiento o una vereda, trabajando con sus líderes de lunes a domingo, 24/7, y con un liderazgo real y presencial proporcionado por una institución comunal que se fortalece día a día con el esfuerzo de sus dirigentes, pero también con los comunales como brazos activos del gobierno en el territorio.
Se trabaja para mejorar puntos del centro urbano caducados, inadecuados y degradados, y que se conviertan, con la participación de la gente, en lugares de referencia histórica, turística, logística, industrial, laboral y ambiental que generen proyección nacional e internacional del Distrito.
Son procesos de gobierno complejos que tienen como meta la conjugación de acción y decisión política, comprensión ciudadana y una excelente gestión probada, demostrada y reconocida por los cartageneros.
De esos componentes, el de disposición, comprensión y generosidad de la ciudadanía juega un papel fundamental en la transformación de la ciudad, para restablecer el tejido social y su cohesión, establecer orden y proyectar carácter para administrar y generar esperanza de un futuro cercano mejor. Siguen los retos y se trabaja para ellos. La transición ambiental, inapelable en el bienestar colectivo, y la vida saludable, no solo en lo físico sino también en lo psíquico y emocional, requieren una nueva visión del desarrollo de la ciudad.
Seguir craneando la movilidad, la economía de producción, el mejoramiento continuo de la seguridad, el consumo, la superación de la pobreza y las desigualdades, como también la apuesta robusta, eficiente y eficaz en infraestructura, con total consideración y respeto por el medio ambiente como garantía de bienestar.
El trabajo entre gobierno y comunidad debe ser compartido, lo cual lleva a una sinergia positiva y colaborativa entre organizaciones comunales de todos los niveles, buscando ese diálogo social que permita generar brillo y esplendor, pero, ante todo, seguir construyendo en concreto y con total claridad esa ciudad de derechos y oportunidades sociales.
El Instituto Comunal y las Juntas de Acción Comunal están llamados a ser ya los protagonistas de esta apuesta acertada, planteada por el gobierno actual y por el que ha de venir en la misma sintonía, para no perder la continuidad necesaria y estable en la que se viene trabajando y escuchando el liderazgo comunal activo y propositivo.
La apuesta sigue: gobierno comunal para avanzar.
* Odontólogo, especialista en Seguridad Social y en Gerencia en Salud. Exdiputado. Exdirector (e) del Dadis. Exsecretario del Interior y Convivencia Ciudadana del Departamento de Bolívar
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