
Tras el jaleo del pasado viernes 7 de enero, propiciado por las amenazas de unos mototaxistas de paralizar a Cartagena si no se atendían sus peticiones, y la advertencia del alcalde William Dau Chamatt de utilizar el Esmad y, de ser necesario, militarizar la ciudad, si los mototaxistas proseguían con sus pretensiones, todo indica que voceros de los mototrabajadores y funcionarios del Distrito volverán a reunirse hoy con el fin de intentar una concertación (leer ‘«Este es el momento de hablar de fondo sobre el problema del mototaxismo en Cartagena»: William Dau‘).
De acuerdo con lo que se ha podido establecer, varios de los colectivos que agrupan a los mototaxistas anunciaron que, a pesar de las irascibles declaraciones del burgomaestre, «como prueba de la buena voluntad que siempre nos ha asistido vamos a reunirnos otra vez en una mesa de concertación, pero estamos solicitando que a esta asistan representantes de los organismos de control, con el fin de que sean veedores y garantes de lo que allí se dialogue«, como indicó –off the record – uno de los líderes del gremio.
De acuerdo con otras fuentes, al margen de los avances de la reunión, algunos colectivos ya decidieron demandar el Decreto 0010 del 6 de Enero de 2022 (que volvió a establecer el día sin moto el segundo y último viernes de cada mes, así como el pico y placa de lunes a viernes para los «vehículos tipo motocicleta de cualquier modalidad y cilindraje«), por considerar que dicho acto administrativo tiene unas falsas motivaciones o, en algunos casos, hay ausencia de estas, ya que se trata de un decreto que viene copiándose y pegándose, tal cual, desde hace varios años.

En concepto de Érick Urueta Benavides, vicepresidente de la Confederación General del Trabajo, para avanzar en los diálogos lo primero es establecer si el secretario del Interior, David Múnera Cavadía, y el director del Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte -DATT-, Janer Galván Carbonó, «tienen o no poder de decisión, ya que hasta el momento lo que hemos visto es que el alcalde los desautoriza, tomando siempre él las decisiones, y lo que ocurre es que nos hacen perder el tiempo«.
Para Urueta Benavides, quien en su condición de dirigente sindical y abogado acompaña a los mototaxistas en las mesas de concertación, el hecho es que al alcalde William Dau no le creen ya que este, en el pasado reciente, durante otras protestas ciudadanas que, incluso, terminaron con bloqueos, ordenó que el Esmad no interviniera, y ahora, en un cambio de discurso «y de manera incoherente, hoy amenaza con echarle el Esmad a los mototaxistas, acusándolos de ser unos delincuentes, y de militarizar a la ciudad. Esta posición no la asumió en protestas anteriores porque eran promovidas por varios de sus fieles seguidores, entre ellos la señora Lidy Ramírez Palencia y varios de los miembros de su grupo político«.



