
El poeta, ensayista, periodista, filósofo y político cubano José Julián Martí Pérez -más conocido por José Martí – dijo en una ocasión que “hay tres cosas que cada persona debería hacer durante su vida: plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro”.
Y aunque podría suponerse que el periodista John Zamora Melo, un acérrimo defensor de las doctrinas diestras (es decir, de derecha), no es propiamente admirador de José Martí, quien fundara una colectividad siniestra (es decir, de izquierda): el Partido Revolucionario Cubano, todo indica que lo del árbol, el hijo y el libro sí se lo tomó en serio. Y hasta más.
Que se sepa, desde joven, todos los años, el director de Revista Zetta ha sembrado árboles en los más variopintos lugares de Cartagena.
Como se sabe también, con su esposa, Ángela Moscoso, han conformado un hogar donde reinan sus dos hijos: Rodrigo y John Gabriel.
Y durante el último semestre de este año, aprovechando que la pandemia del Covid-19 lo obligó a permanecer la mayor parte del tiempo en su casa, terminó de atender -tal vez sin proponérselo – la triple sugerencia de Martí… y escribió un libro.
Se trata de ‘Siete Lecciones de Trombón y una Pandemia‘, un ensayo sobre música y, particularmente su experiencia como aprendiz de trombón, y sobre sus vínculos familiares y el ejercicio del periodismo.
En diálogo con Revista Metro, Zamora señaló que, durante el confinamiento, decidió dedicar más tiempo a su afición por el trombón y encontró en Facebook las clases del profesor Javier Yera, maestro del conservatorio de Jaen, España, a quien le escribió una carta donde resumió su experiencia como aprendiz y las dificultades para aprender a ejecutar un instrumento sin tener conocimiento de teoría musical.
Y a partir de allí, dijo, surgió la idea de escribir algo más detallado y, sin proponérselo, terminó escribiendo un libro que finalmente se imprimió en los talleres de Alpha Group SAS, «una empresa cartagenera con amplia experiencia y elevada calidad en sus trabajo, y el resultado es de plena satisfacción«, como afirmó Zamora.
“Llevo más de 30 años escribiendo noticias, crónicas, análisis, artículos de opinión, titulares, informes, es decir, todo tipo de textos, pero jamás me había detenido a escribir desde mi corazón, desde mi experiencia y desde mi afición por la música”, le confesó Zamora a Revista Metro.
“Como sabes también«, agregó; «he sido gestor cultural y agente musical, y en el manejo de orquestas he tenido el privilegio de estrechar amistad con grandes profesionales de la música que me han inculcado la responsabilidad en el estudio, la constancia y la perseverancia. La música exige disciplina, sea para ejecutarla o para escribir de ella”.
A manera de resumen del contenido del libro, Zamora escribió esta frase de la contracarátula:
“En la ejecución del trombón / seré de los más discretos, / un eterno aprendiz, / pero en entusiasmo / soy de lo mejor, / y eso me hace feliz”



