
La Fundación Cívico-social pro Cartagena –Funcicar, tiene también inquietudes por manifiestas debilidades en la Licitación Pública SID-UAC-2021 que por más de $7.996 millones adelanta el Distrito de Cartagena para las obras de rehabilitación vial de la ciudad.
El colectivo cívico, que a través del Observatorio a la Contratación Pública visibiliza «el proceso y estado de la contratación en la Alcaldía de Cartagena, con el fin de activar el interés y el control sobre la inversión de los recursos públicos«, como se indica en su página web, hizo un llamado al Ejecutivo distrital a «planear y ofrecer mayores garantías en los estudios previos y pliego de condiciones para tener mayor precisión sobre las cantidades a ejecutar y no dejar esta responsabilidad a los contratistas e interventor, así se minimizan los riesgos de inversiones incompletas que no satisfacen la necesidad planteada«.
Expresó su inquietud -asimismo – porque haya «un presupuesto de casi $8 mil millones con la expectativa de intervenir 10 vías que podría convertirse en menos de 5 vías, dependiendo de lo que definan contratistas e interventor«.
Como se recordará, Revista Metro informó ayer que el presidente de la Comisión de Presupuesto de Concejo, Fernando Niño Mendoza, denunció que en la elaboración de la matriz de riesgos de la citada licitación se habría cometido un supuesto plagio, ya que, según dijo, «es un copia y pega de un proceso de la entidad ESU de Medellín» (leer ‘¿Qué hay tras el ‘copy & paste’ en el proceso licitatorio de rehabilitación vial de Cartagena?‘).
Sobre la denuncia del concejal Niño Mendoza, la directora de Funcicar, Carolina Calderón Guillot, advirtió que estas «son situaciones que pasan con alguna frecuencia«, y que lo importante es que no se presenten «en temas vitales del clausulado contractual«. «En este caso en particular«, señaló, «no altera este proceso«.
Sin embargo, a través de la plataforma habilitada para ello, la entidad presentó varias observaciones al cuestionado proceso licitatorio, entre ellas que este «no está debidamente planeado, ni por los funcionarios de la Secretaría de Infraestructura ni por un tercero a través de una consultoría«; y que «el estudio previo y el pliego de condiciones solo tiene contemplado una lista de ítems y un diagnóstico preliminar«.
«Esto quiere decir«, advirtió Funcicar, «que una vez el contratista es escogido, la Secretaría con el contratista determinarán cómo van a intervenir las obras contempladas y por eso no habría claridad en las cantidades a ejecutar. Además, tal como se encuentra organizado el proceso, le corresponde al interventor y al contratista labores propias de un consultor, ya que tendrían que definir las cantidades de los materiales a utilizar y formular diagnóstico, actividades que no son su área de experticia«.
Inquieta a Funcicar, igualmente, que el presupuesto sea «por monto agotable«, ya que «en esa fase de diagnóstico y alistamiento se definirán el número de vías a intervenir, con lo cual hay una expectativa de un número de obras pero es posible que con los recursos disponibles no se logren intervenir todas«.
Y aunque aclara que «esta modalidad (..) es legal, y que el Distrito en el pasado ya la ha usado en otros procesos«, el colectivo advierte que, en todo caso, «presenta riesgos inherentes que se han podido evitar si el proceso de licitación hubiese presentado el análisis completo en la etapa precontractual«.
«Otra situación que podría pasar«, cuestionó asimismo Funcicar, «es que el proceso se encuentra dividido en tres grupos y cada grupo cuenta con múltiples frentes de trabajo, por lo tanto es posible que un único contratista gane los tres grupos y se concentre en una sola empresa la ejecución de las múltiples obras«.
«La oferta económica se presentará por el total del precio del total de los precios unitarios, sin tener en cuenta la cantidad de obra a ejecutar, lo que no asegura que la oferta escogida sea la mejor en el factor económico«, advierte igualmente la entidad.
En diálogo con Revista Metro, Calderón Guillot manifestó que «la rehabilitación de la malla vial de la ciudad no es una nueva necesidad; este proceso ha podido ofrecer mayores garantías en la etapa precontractual para no dejar en manos de contratistas e interventor la responsabilidad de definir las cantidades de obra como si fuera un consultor. Si bien hay un presupuesto cercano a los $8 mil millones, consideramos que por monto agotable se corre el riesgo de tener una expectativa mayor en ejecución de vías que las que efectivamente van a poder intervenir«.
«Por otro lado«, agregó, «las obras dinamizan la economía local, por eso es importante que el mayor contratante, la Alcaldía, considere dar anticipos para promover la pluralidad de oferentes«.
Lea las ‘Observaciones de Funcicar a la Licitación Pública SID-UAC-2021‘
La respuesta del Distrito
Todo indica que hoy, aprovechando una citación que le hiciera el Concejo a rendir cuentas de su gestión, el secretario de Infraestructura, Luis Villadiego Cárcamo, responda las inquietudes de Funcicar, del concejal Fernando Niño y de otros actores locales.
No obstante ayer mismo el funcionario, a través de su cuenta en Twitter, dirigiéndose al concejal Niño, expresó que «la estructuración de nuestro proyecto ‘Salvando Vías‘ está lejos de ser un proyecto carente de planeación. Estamos a la espera de tener el espacio en el Concejo Distrital para sustentar su estructuración y presentarle las herramientas utilizadas. (Sobre) los mapas de calor, las caracterizaciones, los anuncios de los recorridos de nuestras brigadas amarillas, cronogramas de recorrido, dimensiones de cada punto (…), con gusto le aclararemos sus dudas y haremos las correcciones que haya lugar«.
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